No voy a contar todo el cuentito nuevamente.
El resúmen sería:
El gobierno de Hermes Binner contrató a una empresa del Grupo Clarín para imprimir las boletas que se utilizarán en las próximas elecciones y que además propició que pueda quedarse con la adjudicación al permitirle bajar su oferta.
El programa 6-7-8 realizó este informe:
Agustín Rossi dijo: “La verdad no ofende a nadie. Le dieron la adjudicación a la imprenta asociada con el Grupo Clarín y El Litoral de Santa Fe, asi que cual es el problema”
Perlas de la licitación
1) Los socios Clarín y El Litoral se presentan a la licitación pero diciendo que sólo terminarán de conformar la UTE si la ganan y les adjudican el contrato.
2) Tienen que presentar los Certificados de Capacidad Fiscal para Contratar de la AFIP (que demuestra que no tienen deudas impositivas ni previsionales), pero sólo lo hace Artes Gráficas Rioplatenses. Artes Gráficas del Litoral no lo presenta ni se lo piden, porque saben que no se lo pueden dar por las deudas de El Litoral con los empleados del diario y del canal de cable Cable & Diario (ambos en conflicto por demora en el pago de haberes y con sospechas de haber derivado plata de los Repro- subsidios del gobienro nacional para pagar salarios- que le dieron el año pasado a otros fines).
3) En el expediente queda perfectamente claro que Artes Gráficas del Litoral es un 50 % de Clarín y un 50 % de El Litoral, pero es una especie de empresa "pantalla", porque en realidad existía desde antes y se llamaba Artes Gráficas Litoraleñas (conformada exclusivamente por Clarín). Desde que cambió de nombre se incorporó El Litoral S.R.L., e hizo aportes (en dólares), aunque no integró totalmente el dinero y aumentaron el capital de la sociedad, de $ 6.300.000 a algo más de 25 millones, pero sin poner más plata: simplemente capitalizando los aportes originales de los socios (en dólares), al compás del aumento del tipo de cambio.
4) Lo de la división del capital social de AGL fifty & fifty entre Clarín y El Litoral no es un dato menor, porque en el expediente de la impresión de las boletas únicas para las elecciones (en el cual la empresa Boldt - que es la que cotizó más barata -impugna la oferta que presentaron Clarín y El Litoral como Artes Gráficas del Litoral), evaluaron la solvencia financiera no de la oferente (AGL), sino de Artes Gráficas Rioplatenses (es decir Clarín), con el argumento de que era lo mismo porque era la dueña del 99,32 % del paquete accionario de AGL (lo cual el expediente de los libros demuestra que es mentira, es 50 % y 50 %).
5) La impresión de los libros no es encarada por el Ministerio de Educación (lo que correspondería, ya que están destinados a las escuelas), sino por la Secretaría de Comunicación Social que conduce Rubén Galassi (el hombre de Binner en el manejo de los negocios comunicacionales), quien maneja la pauta oficial, y se paga con las partidas del ministerio de gobierno de Bonfatti (el actual candidato de Binner a la gobernación); aún cuando formalmente al inicio se trataba de un supuesto pedido del ministerio de educación. En síntesis, un canje por apariciones en los medios del Grupo Clarín de manera encuebierta y extorsiva.
En la ventanilla de cobros del Grupo Clarín seguramente están contentos con Hermes Binner, hay millones de razones para sospecharlo. Pero de vencer Bonfatti en las internas del frente Progresista y posteriormente en las elecciones provinciales (separadas de las nacionales por mandato constitucional) la estrategia del Grupo Clarín, para evitar el voto cruzado hacia el socialismo y Cristina Fernández en la Nación, y a la vez restar caudal al Frente Para la Victoria, es poner en marcha una colectora progresista con la fórmula Binner y un radical que lo secunde, Pino Solanas Jefe de Gobierno, Luis Juez en Córdoba, el hijo de Alfonsín o Margarita Stolbizer a la provincia de Buenos Aires, etc, con una expectativa electoral de un 20% de votos nacionales.
Binner sería figura nacional, contribuiría, de este modo, a impedir el triunfo de Cristina y se posicionaría de cara al 2015.
Mientras tanto, el Grupo Clarín cobraría por los favores...que le hacen.
Y hablando de favores, El Litoral saca a Superti, defendiendo la tramoya.